viernes, 11 de septiembre de 2009

Para darse cuenta



Que los productores de todo el mundo han demostrado que, si les dan oportunidad de producir con modernas tecnologías (semillas, fertilizantes, etcétera), no sólo pueden terminar con el hambre, sino también con la pobreza.


Que la solución está en trabajar, investigar, invertir y difundir cómo producir cada vez más alimentos en vez de regalarlos.


Que afortunadamente el Grupo de los 8 lo ha comprendido y resolvieron –en L´Aquila, Italia– destinar 20 mil millones de dólares en ese sentido. Ayudarán a los productores de escasos recursos a acceder a herramientas como mejores semillas y fertilizantes, y ayudarán a las naciones pobres a alimentarse.


Que en L´Aquila cambió el “panorama político” –especialmente en Europa– que impartía dudas infundadas sobre las herramientas agrícolas obtenidas a través de la ciencia moderna como, por ejemplo, el maíz biotecnológico.


Que aún persiste alguna cultura popular que “romantiza” los productos orgánicos, que no son otra cosa que el resultado de la aplicación de antiguos métodos ineficientes de producción, que evitan los fertilizantes y pesticidas. Las personas deberían poder comprar alimentos orgánicos si así lo desean y si disponen de los medios, pero no a costa del hambre del mundo.


Que no hay que olvidar que 25.000 personas mueren por día como consecuencia de la desnutrición.Que la humanidad no debe distraerse de su objetivo principal: alimentar al mundo.Que alcanzar la productividad agrícola actual de 6.000 millones de toneladas, llevó 10.000 años, y que en la actualidad la consumen las 7.000 millones de personas que habitan la Tierra, aún con los problemas conocidos.


Que para 2050 se estima que habrá 3.000 millones de bocas nuevas que alimentar, y teniendo en cuenta el crecimiento y la prosperidad, será necesario duplicar la producción de alimentos.Que para 2050 será muy limitado el incremento de la superficie cultivada, y asumiendo el impacto del cambio climático, resulta prioritario tomar conciencia de la “necesidad critica” de impulsar continuas inversiones publico-privadas, en búsqueda de tecnologías eficientes de producción agrícola, con el fin de “terminar con la pobreza extrema” y “evitar la mayor tragedia humana de la historia”.


Que mientras en los últimos 20 años el aumento de la productividad de los cultivos de maíz y soja ha sido de 40% y 30%, no ha ocurrido los mismo con el arroz y el trigo, dos productos que la humanidad consume directamente. Esto ha tenido que ver con la inversión que se ha realizado en uno y otro caso.


Que la civilización, tal como la conocemos, no podría haber evolucionado, ni podría sobrevivir, sin un adecuado suministro de alimentos. De modo similar, la civilización que nuestros hijos, nietos y las futuras generaciones conocerán, no evolucionará sin acelerar el paso de la inversión y la innovación en la producción agrícola.Que es con mejores semillas y fertilizantes, y no mitos románticos, como se podrá alimentar al mundo.


domingo, 9 de agosto de 2009

Retenciones: mitos y verdades


No es fácil hablar de retenciones cuando ya se ha hablado tanto sobre el tema, y seguramente se seguirá haciendo, pero es importante tratar algunos puntos básicos de una manera clara y librada de todo tecnicismo.Los impuestos, aparte de una herramienta de recaudación, si están bien aplicados pueden ser una herramienta positiva para lograr la tan nombrada “redistribución de la riqueza”. Ahora bien, para redistribuir la riqueza, primero tiene que haber riqueza, y esto es algo que escasea en países como el nuestro. Entonces hay que lograr tener riqueza, y como bien se sabe, la única manera de lograrlo es mediante la inversión, y de este modo aumentar la producción en general. Esto a la vez trae aparejado un aumento del empleo. Si además se aumentan las exportaciones y se disminuyen las importaciones se cierra con un saldo positivo para poder reinvertir, entrar en un círculo virtuoso y aumentar la producción. Es decir, trabajando, se produce más, y se vende más de lo que se compra; y se genera cada vez más “riqueza”. Pues bien, si esto es tan sencillo y de hecho hay muchos países que lo logran, ¿por qué aquí no sucede?, muy simple, porque existen políticas económicas erradas como fue el caso, por ejemplo, de las retenciones, que actúan justamente al revés del propósito que dicen tener.Es un impuesto que grava a todos los productores por igual, sin importar su ingreso o patrimonio. Es un impuesto que ataca a los bienes producidos con trabajo genuino, ya que se fijan sobre el total en bruto de la producción, sin importar si de ese total hubo ganancia, y si la hubiere, cuál es su proporción.De aquí se deduce que el impuesto verdaderamente más justo sería el impuesto a las ganancias, como sucede en los sistemas impositivos de los países más desarrollados. Es decir, si hay mucha ganancia se paga más, si hay poca se paga menos, y si no la hay no se paga impuesto. Este es un impuesto progresivo. Pero sucede que el impuesto a las ganancias es coparticipable a las provincias, esto significa que lo recaudado vuelve al interior del país. En el otro extremo están las retenciones, un impuesto regresivo, que por el contrario no son coparticipables, es decir, quedan en su totalidad en manos del gobierno central, que basa su poder político en esta acumulación de fondos fiscales para después usarlos a su antojo.Sucede entonces que un aumento de las retenciones actúa igual que un aumento de los costos para la producción. Cuando los costos aumentan, disminuyen las ganancias y se paga entonces menos impuesto a las ganancias y así vuelve menos dinero al interior por coparticipación. Mientras, con las retenciones más altas queda mayor cantidad de dinero en las manos del Estado, que acumula más poder, administrando discrecionalmente estos fondos. Es una doble pérdida: el productor obtiene menos ganancia por su producción y a la vez vuelve menos dinero al interior del país y a las regiones que contribuyeron pagando las retenciones.Lo que sucede es todo lo contrario a la “redistribución de la riqueza”, en verdad es una concentración de la riqueza en manos del Estado Nacional y en contra del federalismo, otro concepto que se dice defender, pero que en la práctica se trata de destruir. Es un mito que las retenciones sirvan para redistribuir la riqueza, esto se ha probado con el transcurso tiempo, ya que desde que existen las retenciones, a la vez que éstas fueron aumentando, al mismo tiempo fue aumentando la brecha entre ricos y pobres. Estas políticas claramente fomentan las economías de gran escala, y cuando se dice que se quiere defender al pequeño y mediano productor y desalentar a los pool de siembra, estamos ante otro mito que hay que desmentir.Muy a grandes rasgos éste es el mecanismo de funcionamiento de las retenciones cuando son un porcentaje fijo. La situación es muy distinta y empeora drásticamente frente a un esquema de porcentaje móvil como el que se intentó implementar con la Resolución 125.Con las retenciones fijas, si hay un aumento del precio internacional también hay un aumento del precio interno, que siempre va a ser igual al precio internacional menos el porcentaje fijo de retenciones. Mientras, con las retenciones móviles, al ir aumentando el precio internacional, el precio interno va aumentando pero en una proporción cada vez menor hasta que llega a un punto donde por más que aumente el precio internacional, el precio interno se mantendrá igual. El planteo es totalmente irracional, ya que ante un aumento del precio internacional en dólares, por lógica lo va a acompañar un aumento del costo de la mayoría de los insumos para la producción, también en dólares, mientras el productor sigue cobrando el mismo precio interno en pesos.Si bien hay muchas cuestiones para ampliar y profundizar sobre las retenciones, pienso que lo dicho anteriormente resume la esencia del problema que desató un conflicto histórico que no sólo es del sector agropecuario, sino de todo el interior del país, y por ende del país entero.


Ramiro Raúl Tossi.

Consultor privado, Docente y Licenciado en Economía con orientación en Economía de Empresa de la Universidad del Salvador.

domingo, 3 de mayo de 2009

Las exacciones al campo.


- FEDERALISMO Y VALOR AGREGADO

Por Ernesto Poblet



Una injusta exacción de 5.400 millones de dólares se aplica sobre elvalor bruto de la producción del campo. Sobre esas cifras losagricultores también deben adicionar el resto de la pesada presióntributaria de nación, provincias y municipios. El Estado se "asoció"por medio de una cuestionable resolución ministerial -disponiendo deretenciones- sin arriesgar ni invertir y para nada apoyar en laspérdidas y costos de la explotación. La sequía constituye una causalde fuerza mayor que al menos debería eximir de sus cargas tributariasa los expoliados trabajadores del campo, despectivamente travestidospor Kirchner en "representantes de las patronales rurales...". Setrata del mismo sector productivo que en los últimos cinco años aportódivisas a la comunidad nacional por más de 120.000 millones dedólares.

El Congreso de la Nación sigue siendo el mejor escenario para dar unanueva batalla del campo contra el autoritarismo manifestado por losKirchner al disponer los montos de las cuestionadas retenciones en unaarbitraria e irritante repartija teóricamente entre nación, provinciasy municipios -por un lado- y decidió el adelantamiento antojadizo -sinfundamentos serios- de casi ocho meses de la fecha legal de laselecciones. Pero el Poder Judicial debería ser el órgano adecuado paraplantear el amparo necesario para el cese de la sangría permanente defondos en medio de los daños emergentes del fenómeno de laextraordinaria sequía. Los jueces tienen las potestades suficientes yde aplicación inmediata para paralizar los efectos que desesperan alos trabajadores del agro, víctimas dramáticas del fenómenoimprevisible e inevitable de la carencia vital de agua en los mesesdel crítico verano transcurrido. Si bien existe un resignado pesimismoen la recurrencia a la justicia por las presiones del Consejo de laMagistratura contra todo juez que se pronuncie a favor de losdemandantes contra el actual gobierno, no es menos cierto que estaanómala situación es transitoria y presta a resolverse por medio delos cambios políticos que se avecinan entre el corto y mediano plazo.Prueba de ello es la maniobra desesperada del adelantamiento de loscomicios de octubre.

LAS ESTRATAGEMAS DEL MATRIMONIO

No ha pasado mucho tiempo del show de promesas formuladas por lapresidente Cristina ofreciendo el monto de las retenciones hacia laconstrucción de hospitales, escuelas y viviendas. Con su particularestilo de gobernar diariamente desde los micrófonos en actos popularescon presencia de público adicto -incluidos gobernadores, legisladoresy sindicalistas- anunció su prodigalidad sin realizar ni el mínimoacto jurídico o prospecto de ejecución de estas obras públicas que almenos algunas veces llegaron hasta la etapa de la piedra inaugural.

Los gobernadores e intendentes han recibido fondos de acuerdo a loshumores de la pareja presidencial o a los "méritos" evaluados a travésdel transcurso del tiempo y la obsecuencia sustentable. Sonconscientes de las probables actitudes a asumir por los Kirchnerimputando las nuevas partidas esperadas -del reciente 30%- a entregasanteriores de ATN o los demás recovecos administrativos que permitenescabullir la plata a través del cablerío enmarañado de la red desubsidios. La falta institucional de controles, los superpoderes y eltemor a las reacciones iracundas de Néstor o hieráticas de lapresidenta, atormentan a los mandatarios locales, los alcaldes o losperiodistas incursos en las falacias uniformadas.

La circunstancia apuntada se agrava. Los gobernadores e intendentesdel interior saben a ciencia cierta que los intereses electorales deKirchner se concentran sobre el conurbano bonaerense. Tiemblan alsolo pensar que el 100 % de lo prometido en los últimos espectáculosde los jardines de Olivos sólo irá a parar a las arcas de los baronesy punteros del Gran Buenos Aires. Sería bueno que los afectadoskirchneristas del interior -incluyendo al gobernador de la provinciade Buenos Aires- tomen conciencia acerca de sus propiasresponsabilidades al incidir sobre sus diputados y senadores paravotar y respaldar la suma del poder público que prohíbeterminantemente el artículo 29 de la Constitución Nacional. Por algosagrado existe esa norma.

También deberían asumir los mandatarios y representantes políticos deuna buena vez la claridad del fenómeno federal sustentado por Alberdi,las constituciones de los Estados Unidos y la República "Federativa"del Brasil entre otras. Las riquezas que elaboran y facturan losproductores, profesionales, industriales y demás trabajadores del agroson mejor distribuidas por ellos mismos -mediante reinversiones,ahorros anticíclicos, gastos emergentes, equipamiento, laboratorios,empleos, tributos, etc.- y no por los políticos del gobierno central yla trenza burocrática que todo lo deglute sin demostrar adonde va aparar lo que produce el interior arriesgado, creativo, triunfador yentusiasta que ya grita "basta...". Las economías provincialesautónomas y desarrolladas no necesitan proveerse de escuelas,hospitales, viviendas, rutas, puertos y toda infraestructura pública através de dádivas demagógicas del pulpógeno poder central. Viajen aCanadá e investiguen si alguna vez salió un cheque de Ottawa para unaobra o cualquier otro gasto hacia los estados autónomos o ciudadescomo Montreal, Toronto, Calgari, Vancouver, Edmonton, etc. Preguntaría porqué nuestros "nacionalistas de opereta" proclaman la "federación omuerte" y quieren nacionalizar hasta el bife de chorizo, el dulce deleche, la yerba mate y si fuera por ellos traerían de nuevo el IAPIpara hacerle compañía a paquidermos complicados como el PAMI, ONCAA,ENARSA, ANSES y demás aberraciones asombrosamente llamadas"federales".

Otro acto de gobierno ostensiblemente antifederal lo protagonizó lapresidenta pasando inadvertido por la costumbre de admitir lastransgresiones disparadas a granel. Después de anunciar el sorpresivoregalo que prodigaba a las "felices" provincias les advertía con sumejor audacia de mando algo así como: ¡ojo, cuidadito eh, esta platadel 30% se las damos para hacer obras públicas y nada más...! Algunosmal pensados observan que el saber jurídico de la mandataria luce algoretaceado...

Merecería el matrimonio presidencial hacer un curso acelerado encualquier ciudad agropecuaria para aprender lo que es el indubitable"valor agregado" en esta era de la inteligencia y la informática yadornar correctamente sus discursos con un ponderado conocimiento decausa. El grano de trigo pelado y la carne enfriada decimonómica ledio desarrollo genuino y vital a esa gloriosa, admirada nación delcentenario. La soja transgénica, el adelanto científico, lasinvestigaciones, la tecnología avanzada, la superación de la aftosa,las computadoras, las inversiones de capital que nos esperan despuésde superados los obstáculos del kirchnerismo llevarán a la Argentina aocupar su lugar en el mundo con el auténtico e inmenso valor agregadoque conlleva la tecnología moderna y que el campo, calladito, supoasumir en menos de una década sin el abrazo de oso del estadonacional. Sólo nos falta recuperar -además del federalismo- ladichosa libertad de mercado inmersa en los principios que preconizanel poema de don Vicente López y Planes y el preámbulo de los padresfundadores de 1853 cuando nos demandan "asegurar los beneficios de lalibertad...".

El autor es abogado, periodista,historiador y ensayista.

22-03-09

jueves, 9 de abril de 2009

El sur de Patagones, casi un desierto


Están afectadas cerca de 500.000 hectáreas. La sequía se pronuncia dramáticamente desde diciembre último. En lo que va del año, han llovido 32 milímetros; en todo 2008 el registro marcó 178.


"Acá tienen que venir técnicos para que nos digan qué hacer con el partido de Patagones. Sabemos que, en la desesperación, muchos productores van a salir a arar si llueven 30 milímetros, como lo hicieron en enero y en febrero (últimos), pero lo cierto es que la situación se agrava cada día más". La frase corresponde a la dirigente rural Daniela Gross, de Mujeres Agropecuarias en Lucha, quien reside en la localidad de Stroeder, a 80 kilómetros de la ciudad cabecera, uno de los sitios donde la sequía extrema llegó para quedarse. "Necesitamos que las autoridades y los especialistas, del INTA o de donde sean, se sienten con nosotros a resolver este problema que no sabemos cuándo va a parar", agregó. Según Gross, con quien coincidió el productor José Luis Zara, cerca de 500.000 hectáreas están gravemente afectadas por la --hasta ahora-- peor sequía desde 1962, lo que representa casi el 42 por ciento respecto de las poco más de 1.200.000 hectáreas del distrito más austral de la provincia de Buenos Aires. "Es cierto que hay áreas más afectadas que otras. Por ejemplo, en la zona cercana a Stroeder ya son 3.000 las hectáreas que se encuentran en estado terminal e, incluso, ya sin la presencia de los dueños de los campos", comentó. La zona de Las Jarillas, ubicada a 30 kilómetros al sudoeste de Stroeder, muestra una situación tan compleja como que es imposible transitar en camionetas 4x4 por los caminos vecinales, sencillamente porque están cubiertos de arena hasta la misma línea de los alambrados. En este lugar, en lo que transcurre de 2009 han llovido 32 milímetros: el 5 de febrero, 12; el 20, 2; el 12 de marzo, 9 y el 19, 9 mm. En todo 2008, cayeron 178 mm. El fenómeno, ahora, se encuentra en pleno desarrollo en el sector denominado La Celina (hacia el este) y en Emilio Lamarca (al norte). "Viniendo desde Villalonga, donde hay riego, y hacia el sur, está afectado casi el 80% del distrito. No es descabellado decir que en este tramo sólo se verán suelos arrasados", manifestó. "Hace un mes nos daba la sensación de ver algo `verde', cuando en realidad era cardo y, en algunos casos, flor amarilla. Creo que en 15 días más no quedará nada de nada", aclaró. Un debate --no cerrado-- acerca de la "voladura" de campos se da por estos días, en que una muestra puede apreciarse a poco de transitar por la ruta nacional 3 sur, cuando el viento arrastra la tierra en dirección al mar y crea una sensación de peligrosa neblina. Esta zona de Patagones enfrentó no pocos desmontes y, además, arados convencionales, con todo lo que ello implica en circunstancias climáticas excepcionales como las de la coyuntura. Los dos hechos, según los especialistas, provocan que la tierra vaya de un lado a otro por efecto del viento y que se convierta en infértil, más aún en períodos de seca. Gross citó que el 80% de los productores estroedenses está afectado en forma grave (unos 200) y que, de unos 1.000 registrados en el distrito de Patagones, hay 700 en problemas. "Las vacas ya no comen los cardos, porque tienen mucha tierra y telarañas y están a punto de secarse en forma definitiva", citó, por su parte, Zara. Respecto del envío de maíz por parte de la Nación para los productores que poseen animales y padecen la sequía, son alrededor de 100 los que están inscriptos en Stroeder. "Son 45 kilos (de maíz) por animal, para 10 o 15 días como máximo. Pero después habría que esperar un mes y medio; así no sirve, porque desde el momento que el animal ingresa a comer no es fácil pararlo, o quitarle la comida", expresó Zara. En la antevíspera, llegaron a la localidad 233.640 kilos y el resto se espera para los próximos días. En total, se han prometido 1.350 toneladas. Para muchos, el maíz llega tarde, porque el éxodo de animales de Stroeder, fundamentalmente hacia La Pampa y el norte de la provincia de Buenos Aires, es permanente. Como es lógico suponer, a precios irrisorios. "En una feria que se hizo acá, hace diez días se fueron 2.000 vacas; eso es muchísimo para nosotros. Es cierto, hubo un buen precio, de unos 500 pesos en promedio, pero se trataba de animales en buen estado", sostuvo Gross. "La vaca que todavía come cardo tiene un buen estado, pero a la que está mal la compran en 250 o 300 pesos. Incluso, en muchos remates no quieren que el animal vaya a la feria porque se han registrado casos de muerte por estrés", agregó. José Luis Zara está en el campo desde chico. Pero, en 1997 se radicó en Bahía Blanca para desempeñar su profesión de ingeniero civil y, en 2000, se capitalizó en hacienda y regresó a trabajar en 1.500 hectáreas --500 de ellas propias-- a 21 kilómetros de Stroeder. Llegó a tener 300 madres y hoy debió reducir su plantel a casi la mitad. "Aún asumiendo todos los costos, que son a pérdida, prefiero arriesgar para mantener mi vaca y no quedar fuera del sistema", contó Zara. "A números de hoy, mantener una vaca cuesta cerca de 600 pesos. Me empecino en seguir dándole de comer porque si la vendo será a 300 pesos, pero si la tengo que ir a comprar del otro lado de la barrera (sanitaria), la tengo que pagar $ 2.000", explicó. "Sé que si vendo el rodeo me tengo que ir de la zona nuevamente y no regreso nunca más", aseguró.
Créditos, sí Gross justificó el pedido de créditos con tasas subsidiadas, que realizan firmemente ante las autoridades municipales, provinciales y nacionales desde enero último. "Si no es así, se hace imposible afrontar esta situación y poder alimentar a la hacienda. Como es evidente que el partido se está quedando sin animales, es importante pedir una ayuda para los productores que aún están en pie", dijo. Zara, quien admitió que no tiene deudas y que siempre se manejó vendiendo y pagando, señaló que hay eventuales soluciones. "Sabemos que en la Nación hay fondos, como los ATN (Aportes del Tesoro Nacional), que podrían bajarse al municipio, o a una agencia de desarrollo, para promover alguna forma de crédito a valor producto para que el chacarero lo pueda devolver", explicó. "A los que aún están en producción, con hacienda en pie, hay que ayudarlos para que no malvendan su hacienda", agregó Gross. Diferente es la visión respecto del productor que ya no tiene animales y que ni siquiera vive en el campo. "Al terminal hay que ayudarlo con dinero para que sobreviva, ya que no se puede hacer nada, porque los campos están arrasados por completo", indicó, para afirmar que se trata de entre 80 y 100 chacareros. En cuanto a los créditos que han gestionado en otras ocasiones, la titular de MA señaló las dificultades cuando los productores se acercan al banco. "Los requisitos son muchos e incumplibles, como que los aportes estén al día cuando la emergencia limita el ingreso y se supone que si uno está en emergencia no puede entrar al banco, Esto hace que el grueso no sea compatible", detalló. Gross confirmó que, así, sólo 50 o 70 productores estarían en condiciones de cumplimentar todas las exigencias. Otra de las alternativas que se considera en Stroeder es la aplicación de la ley provincial de desarrollo del sudoeste bonaerense, que se aprobó en 2007. "La ley es buena porque considera diferente al partido de Patagones, pero no tiene apoyo político; está inactiva", dijo Zara. "Lo que se le ha planteado al ministro (de Asuntos Agrarios bonaerense, Emilio) Monzó es una reunión con el gobernador (Daniel Scioli) para conseguir fondos y se empiece a trabajar con sus programas. Por caso, se pedían, dentro de esa ley, tasas diferenciales para conseguir créditos", explicó el productor.
No a los subsidios del gobierno A través del formato de subsidios, el distrito de Patagones recibió, el último 23 de enero, un total de 9 millones por parte del ministerio de Asuntos Agrarios bonaerense. Se registraron 600 productores y a cada uno les correspondió alrededor de 15.000 pesos. La visión de Zara, en este sentido, es diferente. "No pretendemos subsidios, porque ese dinero se podría haber destinado con tasas subsidiadas y, acaso, hubiera alcanzado a mayor cantidad de beneficiados. No sirven, porque en vez de ayudar dividís a los productores", agregó.
También se nota en Villalonga "La zona de riego de Villalonga también sufre las consecuencias de la sequía, porque se encuentra con menos caudal para regar", dijo la gremialista Daniela Gross. "Lo que los productores necesitan con el riego solo no alcanza para la producción y esto repercute en menores rendimientos y mayores costos", agregó.
"Debemos tratar que nuestros productores permanezcan en sus campos" Tanto para Gross como para Zara, la única y última alternativa de solución para el partido de Patagones, en general, y para la zona de Stroeder, en particular, pasa por el proyecto de riego. Se trata de la creación de dos polos de desarrollo productivo, uno en Cardenal Cagliero y otro en Stroeder, de 50.000 hectáreas cada uno, que se sumarían al ya existente en la zona de Corfo, que posee 49.000 has. "Es un proyecto a largo plazo, acaso a 10 años, pero mientras tanto debemos tratar que nuestros productores permanezcan con los campos, que no los terminen regalando y que, luego, sean otros los beneficiados con el riego", aclaró Gross. "Hay estudios avanzados y parecería que se le prevé dar prioridad al proyecto antiguo que llega por gravedad, que es Conesa-Guardia Mitre y Patagones. Se prevén regar más de 100.00 has. de campo", añadió Zara. "Sería el sueño de cualquier productor de la zona, porque cambiaría climáticamente todo, desde las napas hasta el clima. Sí, un sueño...", dijo.


Guillermo Rueda/Enviado especial a Stroeder


jueves, 2 de abril de 2009

El desequilibrio injusto


Según un análisis de costos realizado por la Sociedad Rural de Tres Arroyos, con los actuales niveles de retenciones, las soja es el único de los cuatro cultivos principales que se siembran en la zona que tiene un rinde de equilibrio (los kilos necesarios para salir hecho) menor al promedio histórico. Los números del trigo y el girasol son feos campo propio y horribles en tierra arrendada. La perlita: entérese de cuánto recauda el Gobierno cuando usted apenas empata


El productor agropecuario se irrita cuando asume que los planes del Gobierno ni cerca están de bajar algún punto de las retenciones a los cuatro cultivos principales. Ante el pedido de la baja en los derechos de exportación, desde la Casa Rosada responden que los dirigentes rurales actúan como oposición política y no como representantes de un sector y que lo que están buscando en realidad es cambiar el modelo de país. "Los intereses de un sector no pueden estar por sobre los intereses del resto de los argentinos", repiten los funcionarios. Y tienen razón.El gran problema es que los fríos números reflejan que esa frase por estas horas no puede ser endilgada al campo. Simplemente porque el cóctel provocado por las nocivas resoluciones de la ONCCA, la nefasta intervención de Guillermo Moreno, la baja en el precio de los granos, la seca brutal que soportó la Argentina y la falta de una financiación amigable hizo que los actuales niveles de retenciones sean insoportables para buena parte de los productores. Eso queda demostrado en un informe elaborado por la Sociedad Rural de Tres Arroyos, estamos hablando de un análisis de costos, cifras en estado puro, no hay contaminación política ni ideológica de por medio. Sólo números. Y salvo en la soja, para usar la birome verde y no roja en los balances del resto de los cultivos hay que invertir mucho y esperar que el clima se porte bien, algo que hace varios años no hace.EquilibristasEl trabajo fue confeccionado por el contador Rogelio Echemendi, secretario de la Sociedad Rural, quien lo realizó teniendo en cuenta un arrendamiento de nueve quintales de trigo, en un campo típico de la zona y aplicando un paquete tecnológico medio; mientras que en el análisis no incluyó costo de financiación, costo de oportunidad por capital invertido ni retiros empresarios. Hablando en criollo: los números no están dibujados (los cuadros completos de los cuatro cultivos pueden solicitarse a campo@lavozdelpueblo.com.ar).Por el contrario, los resultados parecen una mala caricatura. Anote:* Trigo: para salir hecho hay que cosechar 29,1 quintales en campo propio y 39 en superficie arrendada.* Soja: para empatar se necesitan 14,5 quintales si uno es propietario y 20,7 si es arrendatario.* Girasol: se deben levantar 17,2 quintales para no perder plata en un campo de propiedad y 24,2 si alquila.* Maíz: 37,5 quintales es lo que hay que cosechar por hectárea en campo propio y 49 en tierra arrendada.Vamos a detenernos en el caso del trigo, cultivo que por las características del clima de la región es históricamente el pilar de las empresas agropecuarias locales. Hablar de 29 quintales en campo propio no es para asustarse, teniendo en cuenta que son muchos los campos que superan los 4000 kilos de promedio. Ahora, la cosa cambia si tomamos los resultados de la última campaña, en la que la media del partido apenas alcanzó los 2200 kilos producto de la seca. A eso hay que sumarle que en el ciclo 2007/08 se habían alcanzado los 2800 kilos, en aquel caso la merma fue consecuencia de una helada tardía. Entonces, con los pronósticos que para este año anuncian que puede volver a faltar agua, ¿cuántos productores pueden apostar a que, al menos, van a salir hecho con el cereal?"Yo, en campo propio, el año pasado perdí 200 dólares por hectárea. No sería lógico jugarme a sembrar en estas condiciones y que me pase lo mismo", decía un productor de Cascallares en una charla rutera, en pleno paro agropecuario. "En mi caso, la campaña pasada perdí 40 dólares por hectárea. No tengo espalda para afrontar una siembra tan riesgosa ahora, por eso no voy a hacer trigo y paso todo a gruesa", explicaba otro, que arrienda una explotación mediana entre Gonzales Chaves y San Cayetano.Bien se podría decir que los números del trigo mejorarían con una soja de segunda. "Es un cultivo marginal con costos marginales. Teniendo en cuenta implantación y cosecha, hay que hablar de 140 dólares, con arrendamiento cero ya que se imputa todo al trigo", explica Echemendi. Y agrega: "Deberías cosechar por encima de los 6/7 quintales para cubrir costos (erogables), a partir de ahí es utilidad. Claro que este año, a pesar de cosecharse más temprano la fina, no hubo humedad y se sembró muy poca de segunda", aclara. Es bueno entonces recordar que en los últimos tres ciclos, la soja tardía fue un rotundo fracaso.DescapitalizadosLa comparación de los números actuales con los mismos cuadros realizados en noviembre de 2008 arroja que los costos algo han bajado y también en cierta proporción mejoraron los precios. Pero hay que tener en cuenta que el problema hoy es también financiero, ya que el productor medio perdió buena parte del capital de trabajo porque cosechó menos kilos y esos kilos valen menos que cuando planeó la siembra, y el financiamiento es escaso y caro."El caso más grave es para quien se le 'descalzó' la relación insumo-producto (técnicamente cambios en los precios relativos). Se debió financiar insumos a 2009 sin poder tomar coberturas cuando la relación era razonable. Así fue que invirtió 550 dolares en 2008 y cosechó 300 en 2009", analiza el secretario de la Sociedad Rural. Y aclara: "Quien pagó sus insumos en 2008 con la relación de ese momento, a costos de reposición no está tan desfasado. Ya que este año siembra con 350/400 dólares y el propietario con 250/300".De todos modos, Echemendi aporta un dato que no es menor. "Siempre hay algo que no se tiene en cuenta y es que el productor de Tres Arroyos, en general, vive del campo. Es decir, la unidad de producción y de consumo personal es la misma".Como sucede de un tiempo a esta parte, la soja es la que ofrece cifras más cosechables. No sólo porque los rindes se acomodan mejor a lo que se viene recolectando, sino porque es el cultivo que demanda menos inversión por hectárea (tanto en campo propio como en arrendado), es decir que se arriesga menos.El girasol, en tanto, en costos de producción no está tan lejos de la soja, pero los rindes de equilibrio no son tan fáciles de lograr en la media de las explotaciones de la región. Con lo cual es más riesgoso, más aún teniendo en cuenta los secos que han sido los tres últimos eneros.Lindo socioEl aporte más rico, y también más irritante, que hace el cuadro a la realidad que hoy vive el productor agropecuario tiene que ver con qué pasa con las retenciones cuando el chacarero cosecha el rinde de equilibrio. Como siempre, agarrarse del ejemplo del trigo es lo más aconsejable para tener una dimensión de lo que atraviesa el chacarero local por estos días.Al productor que arrienda, sembrar, proteger y cosechar una hectárea triguera en la campaña que está por comenzar le costará 423,6 dólares. Para salir hecho, necesitará recolectar 39 quintales (recuerde que el rinde promedio de la zona no llega a los 3000 kilos). Y en ese hipotético escenario, por hectárea, el Gobierno estará recaudando 159,6 dólares. Si el cálculo lo realizamos en campo propio, el costo de producción será de 308,6 dólares la hectárea, y cuando el productor empata, el Estado recibe 119,1 dólares.La foto que entrega la soja es más clara para entender por qué nunca el oficialismo se animó a poner en juego el nivel de los derechos de exportación. Cuando en Tres Arroyos, un arrendatario cosecha los kilos como para no perder pero tampoco ganar, el Gobierno embolsa 234,1 dólares. En campo propio, el poroto también es el cultivo que más engorda la caja central: 164 dólares por hectárea recibe el Estado cuando el productor sale hecho.Se acuerda de la bendita sojización criticada por la Casa Rosada. ¿Hace cuánto que ningún funcionario utiliza ese término? Mucho. En definitiva, queda claro que la renta de la soja no sólo seduce al campo, si el más beneficiado es su poderoso socio que no arriesga nada y factura todo.


domingo, 15 de febrero de 2009

Miguens en campo de confesiones


El ex presidente de la Rural dejó el cargo pero no el poder dentro del sector. Dice que el Gobierno no recibe a los ruralistas como un castigo tras el revés de la resolución 125. Su autocrítica por haber ido tan fuerte por la soja y descuidar otros reclamos.


Por Patricio Ballesteros Ledesma


En su momento ganamos, pero la anulación de la resolución 125 después nos trajo inconvenientes”, confiesa a FORTUNA Luciano Miguens, a casi un año de ese conflicto y con el campo azuzando un nuevo paro. “Yo creo que hoy el Gobierno no va a atender un nuevo reclamo sobre retenciones por las necesidades de caja que tiene”, intuye el ruralista, mientras que la Mesa de Enlace pide la anulación lisa y llana de los derechos de exportación. Luciano Miguens fue uno de los hombres más influyentes en la pelea que enfrentó al campo y el Gobierno el año pasado por la resolución 125 sobre el aumento de las retenciones a la soja. De hecho, el 11 de marzo de 2008, apenas se conoció la decisión del ex ministro Losteau, tomó su teléfono y marcó los números de los líderes de la Federación Agraria y CRA. Aunque con la suspensión de las exportaciones de carne de febrero, hace justo un año, se produjeron los primeros acercamientos, aquellas conversaciones se consideran la protohistoria de la Mesa de Enlace Agropecuaria. Como presidente de la Sociedad Rural Argentina, Miguens participó en cientos de reuniones con las entidades, estuvo en los cortes de rutas, discutió con Moreno y Echegaray y hasta fue el “inesperado” anfitrión del primer paro agropecuario de la era Cristina en las puertas de la Rural de Palermo. “Cuando era el vicepresidente de Crotto en la Rural, hasta le hicimos un paro a Menen”, recuerda el ex dirigente como al pasar.Hoy, aunque ya no está al frente de la Rural ni participa en las reuniones de la Mesa de Enlace, sigue reuniéndose con los ruralistas y es un referente indiscutido para el sector agropecuario. Dejó el cargo pero no el poder, dicen quienes lo conocen en la intimidad; sus trece años a la cabeza de la institución ganadera más poderosa del país los lleva consigo, así como carpetas, archivos y recuerdos que hoy atesora en el living de su casa y el escritorio de su oficina. “Todavía no tuve tiempo de poner orden, pero acá está gran parte de mi historia en la institución”, resume Miguens, mientras sostiene la mirada en una foto de su hijo “Luchi” junto él, durante una protesta rural en su pago (Chascomús). CASTIGADOS. Sus rivales en la SRA no pudieron con él cuando le disputaron el sillón, el Gobierno suele utilizarlo como blanco “fácil” de sus discursos más duros y los ruralistas lo respetan y valoran por su estilo “componedor” y “moderado”. Algunos lo tildan de tibio, desde sectores afines al Gobierno lo acusaron de “golpista”, pero eso no le preocupa tanto como su imagen en la sociedad: “La gente ya no me dice oligarca”, confiesa. Aunque casi no da entrevistas a la prensa recibió a FORTUNA y, sin abandonar su discurso habitual de dirigente, hizo revelaciones sorprendentes. Con las bases del agro pidiendo un nuevo paro y sin diálogo entre el sector y los funcionarios desde hace casi un año, Miguens define este status quo con claridad: “Esa confrontación generó un castigo, una revancha, una venganza del Gobierno”. Fortuna: ¿El problema de fondo entonces es la falta de diálogo más que la falta de medidas?Miguens: Nosotros pensábamos, y sostenemos ahora, que lo más importante era terminar con esa incomunicación, esa confrontación con el sector que no favorece a nadie. Cuando veo las recientes medidas de la Presidenta me parece que no tienen nada que ver con la realidad, todo esto irrita al productor. Me parece que lo que se impone es juntarnos en una mesa a dialogar sin confrontar. Fortuna: Hasta el momento, esa no parece la intención oficial.Miguens: Tienen que darse cuenta que el nuestro no es un sector, como se lo ha calificado: especulador, egoísta, avaro, desestabilizador, sin solidaridad. Hoy vemos que la gente tiene una mirada positiva porque ha entendido más al campo. Aquello de “los terratenientes y los oligarcas” no corre más, hoy no es así el campo. Yo creo que la Presidenta Cristina tendría que recorrer más el Interior del país para ver que significa la producción y como repercute en los pueblos.Fortuna: ¿Usted cree que los Kirchner no saben como es el campo?Miguens: Yo no diría que no lo saben, pero pienso que tienen una visión equivocada. De golpe, vieron la suba de un producto, como es la soja, que tenía una rentabilidad importante para el sector y empezaron a creer en la renta extraordinaria y hablar de que había que distribuirla. Instalaron el tema y a partir de ese momento fueron socios de los productores al 35%.Fortuna: Primero el Gobierno no discriminaba en pequeños y grandes agricultores y luego se dio cuenta que no son todos iguales. ¿Eso no es falta de conocimiento?Miguens: Al principio el enemigo ideal era la Sociedad Rural, porque es un sector al que es fácil pegarle, pero después se fue derivando a los productores chicos que fueron los más perjudicados.CUATRO PATAS. En el campo se dice que si no hubiera existido la Mesa de Enlace, nunca se hubiera logrado la unidad del sector agropecuario que hoy está instalada. En los sondeos previos entre las cuatro entidades, Miguens logró un hito para la SRA, que ahora se considera un antes y un después: integrarse con la FAA, que nació como su opositora. Ambas instituciones (más CRA y Coninagro) parecían imposibles de juntar, pero la soja fue más fuerte. “Tanto a mí como a (Eduardo) Buzzi nos costó el encuentro”, recuerda.Fortuna: ¿La Rural dio un vuelco ideológico?Miguens: Aunque ya venía una tendencia de cambio, es cierto que yo he tratado que se la vea distinta desde la sociedad, pero no me puedo adjudicar ningún mérito. En mi gestión se buscó demostrar que la entidad era diferente que hace 20 o 30 años y hay que tomar en cuenta que tenemos 140 años de historia. Hubo presidentes buenos y malos, momentos buenos y malos.Fortuna: ¿Cómo se dio exactamente el acercamiento de las cuatro entidades?Miguens: El 11 de marzo de 2008, cuando conocimos la decisión de Losteau sobre las retenciones móviles, hablamos y decidimos juntarnos los cuatro presidentes. Hasta ese momento la SRA, FAA, CRA y Coninagro eran muy individualistas, cada una iba con su ideología, aunque en el campo ya estaba surgiendo un clamor. Todos ya nos cuestionaban por qué cada uno iba por su lado, si juntándonos tendríamos mucha más fuerza para reclamar: nos decían que, por ejemplo, la UIA era una sola.Fortuna: ¿Quién propuso ir a un paro en conjunto?Miguens: Fue una idea que fue surgiendo. Cuando acordamos la primer jornada de protesta y decidimos que tendríamos que ir evaluando lo que iba pasando, nos empezamos a juntar casi a diario. En ese tiempo surgió la idea de hacer una Comisión de Enlace para funcionar en forma orgánica, aunque sabíamos que el campo es un poco reacio a la actividad gremial. Fortuna: ¿Tenía reparos al participar de un acto con piquetes?Miguens: Nosotros aconsejábamos que no se corte el paso, pero no hay que olvidar que en cada lugar estaban los productores auto convocados y que mucha gente del interior encontraba en esa forma de protesta la atención de los medios de comunicación. Esa fue la forma de aparecer todos los días en la tapa de los diarios en lugar del suplemento rural.



Fortuna: ¿Qué pensaba sobre los cortes de ruta?Miguens: En principio pensaba cómo me estarían maldiciendo los que estaban impedidos del libre paso (risas). Sin embargo, el corte era bueno desde el punto de vista del llamado de atención y no lo era por sus consecuencias; como el desabastecimiento, tirar la leche en la banquina, no dejar pasar camiones con productos perecederos. BUMERANG. Con las medidas de fuerza que llevaron a casi 120 días de paro y el voto negativo que definió la anulación de las retenciones móviles, el sector agropecuario vivió un triunfo. Pero todo cambió cuando a los pocos meses los precios empezaron a bajar y, como no hay movilidad, las retenciones fijas se volvieron en contra de los chacareros, más aún de los pequeños y medianos. Además, el corte de diálogo posterior con el Gobierno tras ese revés en la pulseada, dejó a la ganadería, la lechería y a las economías regionales sin posibilidades de negociar nada para sus actividades. Lo cierto es que los productores más chicos y las economías regionales hoy están peor que entonces, sin soluciones concretas –salvo la fruticultura, exenta de retenciones–. Y con la sequía y la baja del precio internacional de las commodities, los agricultores soportan hoy una presión tributaria mayor que con la “demonizada” resolución 125. Fortuna: ¿No hizo una autocrítica sobre el perjuicio que hoy les trae la anulación de la resolución 125 y la falta de resolución sobre otros temas?Miguens: En ese momento había que pelear por eso, porque en el momento en que el campo alcanzó esa instancia de ser escuchado, tuvimos reuniones con dos o tres entidades, no se si las cuatro, para ver de qué manera el campo podía tener una mayor presencia mediática.Fortuna: ¿Se decidió reclamar sólo por la soja?Miguens: La verdad que sí y, por eso hago mi autocrítica en este punto, pero nunca pensamos que terminado el conflicto por la 125 no se iba a poder hablar de los otros temas que eran mucho más generales. Después de los festejos por ahí bajamos los brazos y en base al triunfo esperamos una reacción del Gobierno, pero distinta a la que se dio: ganadores y perdedores. Creímos que era el momento para sentarnos a hablar de los productores chicos, pero se creó como un castigo al sector y el Gobierno mantuvo la confrontación. Fortuna: ¿En ese momento recibieron críticas de las bases por dejar de lado todo lo que no fuera soja?Miguens: Sí, claro. Algún productor pudo decir que sólo se ocuparon de la soja sin aprovechar la oportunidad para hablar por la lechería y la ganadería. Pero la discusión de esos temas parecía que no tendrían por qué haberse cortado después del conflicto por las retenciones, que finalmente se ganó. Fortuna: ¿Hoy lo sigue viendo realmente como un triunfo?Miguens: En su momento ganamos, porque conseguimos que no se nos expropiara, en algunos casos, hasta el 80% del precio de nuestros productos. Pero la anulación de la resolución 125 nos trajo además algunos inconvenientes. Fortuna: Pero hoy están pagando más derechos de exportación que entonces.Miguens: Es verdad, hoy la situación es complicada, incluso con la soja. Pero con el maíz, el trigo, la leche y la carne el tema es mucho más grave que antes. POLÍTICA. Ahora que yo no está en la gremial rural, Miguens fue tentado para integrar listas a legisladores en las elecciones de este año pero declinó esas invitaciones. Considera que hay que darle lugar a los jóvenes y asegura que “están surgiendo muchos líderes que se están metiendo en política para representar y ser referentes del campo”. No apoya tanto el surgimiento de en un partido agropecuario como que en cada uno de los actuales haya representantes o referentes del sector. “Un partido del campo sería buscar una posición demasiado parcializada y la política del país es mucho más amplia”, concluye Miguens.


sábado, 14 de febrero de 2009

COMUNICADO DE PRENSA DE LOS PRODUCTORES AUTOCONVOCADOS





POR QUE RECLAMA EL SECTOR AGROPECUARIO?

La sequía y la caída de los precios internacionales no son variables controlables por este gobierno y “el conflicto con el campo” es una consecuencia, no una causa.

La causa eficiente por la que reclamamos es una sola:

LA PERVERSA POLÍTICA DE ESTE GOBIERNO DESTINADA A SAQUEAR AL INTERIOR Y DESTRUIR LA ACTIVIDAD AGROPECUARIA,SOMETER AL PUEBLO Y A SUS REPRESENTANTES .

Esta perversa política no se llama “sequía”, ni “caída de los precios internacionales”, ni “conflicto con el campo”.

Esta perversa política (sobre la cual el gobierno tiene perfecto control) se llama:

RETENCIONES (Confiscatorias, discriminatorias y antifederales).

PROHIBICIONES DE EXPORTAR

MANIPULACION DE LOS PERMISOS DE EXPORTACION A FAVOR DE LOS AMIGOS.


Y ONCCA. Organismo que bajo la excusa del control se ha dedicado a maniatar a la actividad agropecuaria con una parafernalia de medidas burocráticas y a destruirla aviesamente con un dirigismo incompatible con la REPUBLICA, cartelizando (roes mediante) el mercado exportador para hacer caer los precios del trigo y el maíz a niveles inferiores a los que tendrían si la 125 estuviera vigente, y ahora, se agrega la "nueva y gratuita Carta de Porte".

El gobierno no es responsable de la sequía. Pero sí es responsable de haber impedido generar rentabilidad en época de vacas gordas que permitan enfrentar con recursos las épocas de vacas flacas…

El gobierno no es responsable de la sequía. Pero sí es responsable de haber arruinado nuestra imagen en el exterior prohibiendo exportaciones y haciéndonos perder los mercados que mejor pagan, lo cual “agrava” el problema de la sequía.

El gobierno no es responsable de la sequía. Pero sí es responsable de empujar la actividad ganadera a la marginalidad promoviendo la liquidación de vientres (las madres), haciendo caer el precio de “la mejor carne del mundo” a un tercio de lo que percibe un ganadero chileno, o el uruguayo.

El gobierno no es responsable de la caída de los precios internacionales… Pero si es responsable de haber impedido la TECNIFICACION y la INDUSTRIALIZACION de los pequeños y medianos productores en la época de los altos precios confiscando lo que consideró “renta extraordinaria”., desemboco en la actual CRISIS del sector metal mecanico, entre otros, como genetica, insumos etc.

El gobierno no es responsable de la caída de los precios internacionales. Pero si es responsable de haber impedido generar un stock financiero contracíclico que permitirían hoy enfrentar la nueva campaña con recursos y no con deudas.

El gobierno no es responsable de la caída de los precios internacionales. Pero si es responsable de continuar aplicando retenciones inicuas y confiscatorias que agravan la caída, confiscando ya no la renta, sino el CAPITAL, hiriendo "de muerte", el eslabon primario, que es en definitiva lo que esta dañado, y si ese primer eslabon se resiente, dificilmente soporte el resto de los que DEPENDEN de esta cadena, generando un efecto domino; que ya esta pasando y NOSOTROS mismo muchas veces lo hemos mencionado en el pasado, cuando sosteniamos que tarde o temprano esta crisis "inventada" nos podria involucrar a TODOS..


Esta es la causa del reclamo.

Las retenciones continúan como antes de la 125.

Y la ONCCA es el nuevo nombre de las “RETENCIONES MOVILES”. Sus intervenciones son infinitamente más perversas y dañinas… El trigo y el maíz sufren quitas merced a la ONCCA que implican una retención “real” del 40% del precio.

Y son toleradas por la inmensa mayoría de nuestros gobernadores con una pasividad que no se condice siquiera con su calidad de “vasallos” (quizá con la única excepción de Binner).

Un dirigismo discrecional de esta magnitud le hubiera resultado imposible a las monarquías absolutas del siglo XVIII.

Por mucho menos los barones impusieron límites al poder de Juan Sin Tierra, se estableció el principio “No hay impuestos sin ley” y surgió el Parlamento y el Derecho Constitucional consuetudinario como un conjunto de “límites al poder” que ningún monarca, por absoluto que fuere, podría violentar..

Estos son nuestros derechos humanos…

Estos son nuestros derechos naturales…

Estos son nuestros derechos constitucionales…

Estos son los derechos que hacen de una Democracia una República…

Y estos Derechos son un “deber” que ya que no nos pertenece. Pertenecen a nuestros hijos, a nuestras Provincias, a nuestras Comunas, a nuestros pueblos, a nuestras colonias, incluso más allá de la “alianza de vasallaje” que expresa o implícitamente muchos gobernadores e intendentes hayan suscripto con el poder central y unitario.

RETENCIONES CERO
LIBERTAD PARA EXPORTAR
ELIMINACION DE LOS PODERES ABSOLUTISTAS DE LA ONCCA
RECUPERACION DE LOS DERECHOS “AVASALLADOS” DE LAS PROVINCIAS Y MUNICIPIOS…

PRODUCTORES AUTO CONVOCADOS DEL NORTE DE SANTA FE, Reconquista, 12 de Febrero de 2009



domingo, 1 de febrero de 2009

La sequía hace estragos en Algarrobo



El campo, en estado terminal

Los productores agropecuarios de la zona de Algarrobo, en el distrito de Villarino, tienen, sobre sus espaldas, cuatro cosechas perdidas, una importante mortand de ganado y, ahora, soportan una intensa sequía. De no revertirse la situación meteorológica y recibir ayuda oficial, probablemente muchos de ellos desaparecerán.
--¿Algún productor ha pensado en vender su explotación? --¡Yo...! La respuesta de Diego García casi no esperó el final de la pregunta para expresar una idea que, ha venido dando vueltas por su mente, al igual que la de muchos otros productores agropecuarios de la zona de Algarrobo, agobiados por la difícil situación que los ha envuelto. "El problema es que si uno vende... ¿qué hace después?... ¿en qué puede invertir la poca plata que consiga aquí?", interrogó. Ninguno de los numerosos chacareros presentes en una en torno de una mesa dio una respuesta, porque, probablemente, tampoco la tengan. En dos propiedades reune unas 640 hectáreas que le dejó su padre y donde trabaja desde hace dos décadas. La realidad es que, como otros, venía subsistiendo y, ahora, lo tumbó del todo la violenta sequía que afecta a esta zona, como pocas en el país. "Nadie puede negar que no llueve. Lo peor, aquí, es que llevamos nada menos que cuatro cosechas (de trigo) perdidas, por lo que ¿quién puede mantenerse, así, en pie?", se preguntó Fabián Visani, presidente de la Asociación de Productores de Algarrobo y Zona. Para darse cuenta, un forastero, que los campos se vuelan no es necesario que abandone el pueblo. Densas nubes de tierra lo castigan, con fuerza, cada vez que sopla el viento con un poco de fuerza. "Si viene del Norte, nos tapa y, si de pronto, rota al Sur... también", comenta Andrea Onori. Ella, como mujer y ama de casa, padezca en mayor medida las consecuencias. En la mayoría de las viviendas han debido "sellar" puertas y ventanas, para que la arena no invada la vida íntima de los pobladores. Así y todo, muchas veces es imposible enfrentar el fenómeno. "Yo vivo a media cuadra de la estación (ferroviaria) y, en este momento, no la alcanzo a distinguir", nos comentó telefónicamente Héctor Visani, uno de esos días en que el pueblo pareció sumergido en las imágenes que tantas veces nos mostraron películas del far-west. En el Norte, junto al acceso, hay campos pelados peor la sequía y en el Sur, más allá del cementerio, también. ¿Cómo evitar, entonces, las voladuras? Imposible.
***
La charla con los productores engloba toda una problemática que, hoy por hoy, resulta difícil y que, posiblemente, deje traslucir lo que le pase a otros hombres de campo. --¿En esta zona se hace sólo cría o también algo de invernada? --Por sobre todo, cría, pero también invernada, aunque el engorde que se puede hacer aquí es en forma de feed lot.La dificultad es que los granos hay que traerlos desde 300 o 400 kilómetros y se encarece por el flete. De ahí, la necesidad de tener forrajes. --Forrajes que hoy no tienen... --Hace cuatro años que no se pudieron hacer reservas. --Las pasturas naturales, ¿se dan más en el monte? --Sí. Por ahí se sobrecarga (de hacienda). Lo limpio está más "chacreado". Hoy ha llegado el momento en que el pasto del monte se terminó y no se recuperó. Quizás se necesiten seis meses para tener algo, pero si no llueve... --Se deduce que se está dando un achique importante en los planteles ganaderos... --Por supuesto y sospechamos que será más grande aún. Si no precipita de aquí al otoño, como dijeron algunos meteorólogos, algunos tendrán que desprenderse de toda la hacienda. Ya no la podrán soportar más... --Y esa hacienda... ¿a dónde va, quién la compra? --No faltan los que aprovechan la coyuntura. Te pagan precios irrisorios y el comprador pone condiciones. El precio es bajo, el plazo (de pago), largo. Te ven en el piso, pero no se forman y tratan de hundirte más... (Alvaro Sabugo). --En definitiva, no vale ni la hacienda gorda ni la flaca... --Un productor vendió animales flacos, a un frigorífico, a razón de un peso el kilo. Pesaba 300 kilos, igual 300 pesos, menos 80 pesos de flete, le quedaron 220 pesos. ¿Se puede subsistir así? --Claro, la descapitalización es tremenda... --Hace cuatro años, la vaca valía 1.000 pesos. La aguantaste cuatro años dándole de comer, mal o bien. Ahora la vendés a 220. Perdiste casi el 80 por ciento del capital. --Sin hablar de las que se murieron... --Obvio, sólo por la baja de precio. Si contás la mortandad, lo que gastante en alimento, perdiste casi todo... --¿Y si la quieren recuperar? --Esto lo dirá el mercado. Cuando aquí llueva, si llueve algún día, en otras zonas lloverá más y estarán mejor. Por lo tanto, nunca podremos hacer negocio comprando en otro lado. Es imposible tener una revancha aquí. --¿Esta diferencia se marca a la hora de pagar impuestos? --Nos exigen lo mismo que a los que están mejor. Además, este año el problema gravísimo es que la gente que se desprende de hacienda, por obligación, tendrá que pagar Ganancias por algo que no fue rentable.
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Ante cada pregunta, aparecen muchas respuestas. Casi todas, coincidentes en que el panorama es muy oscuro. --En esta zona, las explotaciones son chicas? --La unidad económica, años atrás, eran 300 hectáreas. Así poblaron los campos nuestros abuelos, construyendo casa, galpón, llevando herramientas, la energía. Hoy si no trabaja 1.000 hectáreas está complicado. --Aunque con esta seca da lo mismo más o menos hectáreas... --Sí, claro, hoy por hoy, no hay unidad económica que valga. Aquí pasan los años y en lugar de estar mejor, estamos peor. --Ahora bien, ¿qué pasa si empeza a llover algo? --Las lluvias de febrero y marzo son favorables, junto con las de primavera. Son claves para producir trigo, pero debe llover bien. Se podrían recuperar los campos... --Pero ¿qué significa "llover bien" para ustedes? --Y... de 50 milímetros para arriba. Aquí está todo muy seco... Lo peor es que hablan de lluvias que no van a ser parejas y sí, erráticas. Lo peor es que siempre le erran a Algarrobo... --Ahora bien, ¿los productores están en condiciones de encarar una nueva campaña triguera? --No. Hoy no tenemos para comprar combustible ni semilla. Encima, el valor de la semilla es muy alto. Quizás podría venir un poco de pasto, para la hacienda, pero recién en mayo y la hacienda tiene que seguir comiendo. --¿De donde traen los royos de pasto? --De Lamarque y otras zonas de riego. --¿Y cuánto lo pagan? --Puestos aquí, valen 200 pesos. A principios del 2008 valían de 90 a 100 pesos. Si las cosas siguen así, ¿quién sabe cuánto costará? --Es que la inflación... --La inflación influyó en todos los sectores; menos en el precio de venta de nuestros productos. Lo único que vale menos que en 2003 es el trigo y las vacas. Antes uno sabía que un rollo (de pasto) salía tantos kilos de ternero. Hoy se desvirtuó todo.--¿No han pensado en hacer siembra directa para conservar un poco más el agua de lluvia? --Se podría adaptar a esta zona, siempre y cuando nos ayuden para armarnos de herramientas. El sistema es más caro en maquinaria y tecnología. Quizás evitaría tanta voladura de campos, pero ante una sequía como esta... --Volviendo al trigo, ¿se puede encarar una siembra ignorando cuál será el precio del producto una vez cosechado? --Anote este dato: El que se animó a sembrar trigo (en la última campaña) lo hizo con un precio, en este entonces, de 600 kilos la tonelada y terminó con 400. El productor se tuvo que hacer cargo de esa pérdida de 200 pesos, sin hablar de costos altos y la baja de los rindes... --¿Qué relación hay entre el trigo y el pan? --De un kilo de trigo salen 750 gramos de harina, que permiten hacer un kilo de pan. El kilo de trigo vale 40 centavos y el de pan... 4,50. En definitiva, el costo del pan, no es por el alto valor del trigo, sino todo lo que está en el medio.
***
Los dos únicos caminos que tiene el chacarero, tienen sus pro y sus contra: la agricultura o la ganadería. "La forma más rápida de recuperación se ve en el trigo, que demanda menos inversión: un poco de gasoil y la semilla. En cambio, en ganadería, hay que comprar la vaca y criarla y esto lleva, al menos tres años", nos comentan. --Se entiende, encima, sin rentabilidad... --Aquí no hay producción, pero tampoco rentabilidad. Que haya sequía está dentro de las reglas de juego de ser productor agropecuario. Nuestros abuelos pasaron fenómenos iguales o peores y subsistieron. Lo peor es que estamos regalando las vacas para que los (dueños de los) frigoríficos hagan su gran negocio. Así no camina. Hay 20 individuos en la Argentina que se quedan con la ganancia de todos los productores del país. --¿No existen créditos accesibles? --Hoy, tomar un crédito, a la tasa de interés existente y sin producción, es ir al suicidio... --A la distancia, se puede advertir que lo que les pasa a ustedes ocurre en otros distritos. Patagones, por caso. --(El distrito de) Villarino está discriminado con relación a Patagones. Sabemos que, políticamente, existen diferencias, y los productores no queremos quedar presos de una situación política. --De todos los anuncios oficiales que se hicieron, a ustedes ¿qué parte les llegó? --En mayo nos reunimos con Débora Giorgi (cuando era titular de Producción en Buenos Aires). Nos prometió un subsidio en noviembre. Ahora anunciaron otro, para un pequeño grupo. Son 10.000 pesos por producción agrícola perdida por sequía y por vacas muertas. --¿Y para qué alcanzan esos 10.000 pesos? --A muchos productores chicos le alcanzará para pagar deudas atrasadas en los comercios y sobrevivirán dos meses más. No se extiende a la hacienda. El problema es que la falta de trabajo en el campo se ha trasladado a Algarrobo. Muchos peones fueron despedidos porque al productor no puede pagarles. Esto lo vinimos planteando hace mucho a la municipalidad de Villarino. Les anticipamos el problema social que se daría. Hoy está aquí. --¿Y qué puede hacer en el pueblo un peón rural? --Nada. A lo sumo, una changa. Lo peor es que venimos de cuatro años pésimos y recién ahora (los funcionarios) hablan de emergencia agropecuaria. Nos meten a todos en la misma bolsa. --¿Llegó algún funcionario hasta aquí? --Nadie vino a ver la realidad de Algarrobo. Ni siquiera alguno de los diputados que llegan, en campaña, a Bahía Blanca o Monte Hermoso. Nosotros también estamos en la provincia de Buenos Aires. --Pero el ministro de Asuntos Agrarios (Emilio Monzó) anduvo por estos distritos... --Nos gustaría que venga a Algarrobo. No, a reunirse con nosotros, sino a recorrer y hablar con los productores en su propio campo. Después, que se saquen las conclusiones. Hoy por hoy, el productor no tiene ni gasoil ni semilla. La (semilla) que tenía se la dio a los animales y comprarla resulta muy caro. Por más que llueva, no podemos empezar otro ciclo productivo.
***
La parte final de la visita a Algarrobo, nos permitió comprobar que nada de lo que habían dicho los productores se alejaba de la verdad. Cuando tomamos el primer camino vecinal, nos topamos con algunas vacas lecheras buscando el poco pasto que había en las banquinas. "Hoy lo comen; cuando hay otro pasto mejor, lo pasan de largo", nos comentó Gabriel Araujo. No hay muchas opciones para los animales. La marcha se dificulta, por momentos, en medio de tanta polvareda, más allá de haber caído a la zona en un día de escaso viento. Detrás de los alambrados, campos ayer productivos y hoy transformados en verdaderos potreros. Algunos sin una pequeña muestra de vida vegetal. Importantes extensiones de alambrados deteriorados, productos de la descapitalización del chacarero. En proximidades del denominado "lote 39", la escuela, vacía por las vacaciones. De los 40 chicos que alguna vez concurrieron, hoy sólo quedan 4 o 5 en la primera y otros tantos en el preescolar. Enfrente, el salón donde alguna vez se armaron los bailes más famosos de la zona rural, también vacío y con sus pisos cubiertos por la voladura que no respeta ni puertas ni ventanas. El camino sólo se sortea en camionetas 4 x 4, pero la profundidad de la arena allí depositada a uno lo puede dejar de a pie, como nos pasó a nosotros. En esos mismos caminos y junto a los alambrados, se ha depositado el manto fértil que, en medio del reinado de la falta de humedad, el viento se encarga de manejar a su antojo. ¿Qué brotará cuando llueva? Lo ignoramos. Por allí, unas pequeñas formaciones de cardo ruso que no alcanzan a crecer. Más allá, una de las imágenes más claras de lo que ha hecho la naturaleza, enfrentada con los productores. Un molino, con sus aspas detenidas, el tanque... lleno de arena y los bebederos vacíos. En las proximidades, muchos esqueletos cubiertos por el cuero... y la arena. Después, la imagen que no nunca hubiéramos querido ver. Una vaca, joven, agonizando, sin que nada ni nadie le pueda revertir su lamentable final. "El campo (en Algarrobo) está en estado terminal...", nos expresaron, en más de una ocasión, los productores que nos recibieron y nos acompañaron. La recorrida por las chacras, abandonadas y silenciadas, nos permitió comprobar que si no llueve y no hay una mano que alguien les tienda, la sentencia estará dictada...
Interlocutores
Participaron del diálogo con este enviado, Julio Sabugo, Diego García, Andrea Onori, Alberto Villaverde, Silvia Aceituno, JUan Labeyrie, José L. Girotti, Jorge Veremenchik, Fabián Visani, Alvaro Sabugo y Gabriel Araujo.
80kilómetros separan a Algarrobo de Bahía Blanca. Se lleva transitando por la ruta nacional 22.



miércoles, 28 de enero de 2009

La copla que la organización de Cosquín no dejó cantar a Atilio De Angeli


Alfredo De Angeli en el llano
En tu mirar chacarero
Yo vi llorar al lucero
Allá en tu pago entrerriano
Y cada argentino hermano
Por eso estoy de tu lado
Como de Patria enjoyado
En el ocaso azulgrana
En tu palabra paisana
Haces lo nuestro brillar
Al cielo voy a rogar
Que me alumbre tu mañana.
Hoy me duele ser cantor
Pero celebro a la vez
El ver la limpia altivez
Del heroico sembrador,
Del pequeño productor
A la orilla del camino
Por que labrando el destino
Con el sudor de su frente
Son la luz del sol naciente
La raíz de lo argentino.
A la orilla del caminoví tu sueño campesino
Dios bendiga tu destino
tu razón de sol a sol.
He visto al hombre de campo
Aquel que la tierra labra
Valorando la palabra
Desde la risa hasta el llanto
por eso me duele tantola ceguera sin razón
Lo injusto, es un aguijóncon
un veneno infernal
Un abrazo fraternal
¡Les canta mi corazón!

Tarragó Ros (Censurado en el Festival de Cosquín 2009)

martes, 6 de enero de 2009

Conocer la nueva ruralidad


El autor plantea la existencia de una nueva ruralidad, que integra a proveedores de insumos y servicios, trabajadores, etc., en un entramado de gran consistencia. Esta nueva ruralidad -afirma- viene reteniendo población en el espacio-territorio rural, es de índole sociológica y plantea que se puede ser agricultor y ciudadano rural ampliando los espacios de dignidad.

Enrique Seminario. Consultor agropecuario

La reacción del agricultor ante la decisión del Gobierno de imponer la Resolución 125 derivó en la constitución de la Mesa de Enlace. Se integró con las cuatro entidades de mayor trayectoria y reconocimiento público en representación de los intereses de los productores agropecuarios, más una no-institución que emergió representando a los agricultores no agremiados que se autodenominaron "autoconvocados".Como una suerte de "piqueteros rurales" que vieron amenazada su viabilidad, salieron de los campos y los pueblos haciéndose visibles mediante la metodología, ya hace algunos años "institucionalizada", consistente en interrumpir el tránsito en las rutas como otros grupos lo hacen en las calles o los puentes. Ante realidades vivenciadas como impotenciadoras de proyección a futuro, y ante la percepción de que no hay posibilidades de ser escuchados en instancias de diálogo con poder suficiente como para encontrar soluciones, se recurre a la impotenciación de terceros involucrándolos en una situación conflictiva y de malestar. Malestar que se hace extensivo a toda la comunidad mediante la difusión mediática que lo proyecta al conjunto de la misma.Esta dinámica de tramitación genera una sucesión de hechos de negación del otro que se retroalimenta con reacciones emocionales potenciadoras de pasiones que llevan a opacar o anular muchas veces la racionalidad.Tomado el poder como capacidad de acción en la realidad compartida, cuando dicho poder deriva en discrecionalidad autista que niega al otro considerándose el único poder, se desemboca en reacciones de autodefensa que tienden a neutralizar la negación sufrida para poder ser reconocido y no negado. En esta dinámica no hay espacio para el diálogo sino para el juego de demostración de quien tiene más poder de control en la negación del otro, una dinámica de muerte que crispa el ambiente de convivencia social.En el caso del conflicto con "el campo", el malestar ampliado al conjunto de la comunidad fue aceptado por gran parte de la misma como costo necesario para hacerse escuchar ante el Gobierno y manifestarle que su poder en vez de percibirse como abriendo posibilidades de proyección las estaba cerrando. Tanto por el contenido de las decisiones que se tomaban como por las formas con las que se comunicaban.La constitución de la Mesa de Enlace logró encauzar las energías inicialmente anárquicas de la protesta movilizada por los autoconvocados, integrándolos a éstos en un espacio de institucionalidad para facilitar la apertura de la posibilidad de una conversación para el reordenamiento del funcionamiento de las cadenas productivas. El abordaje de este reordenamiento necesario fue realizado por parte del Gobierno dirigiéndose al agricultor y a las instituciones que lo representan como si fuera una corporación más (como la petrolera, la financiera, etc.). Este fue, desde mi mirada, uno de los principales errores del abordaje de la situación.Y al adjudicarle connotaciones de avaricia, insensibilidad social, dogmatismo neoliberal, motivaciones golpistas, al conjunto de los agricultores, se hizo una simplificación grosera e inconveniente para la tramitación del conflicto. Esto no niega que haya algunos agricultores a los cuales se les pueda adscribir esas características. Pero haberlo hecho en forma generalizada logró potenciar la percepción, por parte de la mayoría de los agricultores, de no estar siendo reconocidos en su realidad. Se eligió hablarle a un símbolo de lo que en su momento histórico pudo haber sido un poder político en una etapa de la historia argentina tal vez negativa para la mirada del Gobierno y de muchos argentinos.Pero claramente se le habló al pasado, ya que el presente refleja una realidad donde el agricultor, que se sintió agredido, logró integrarse no sólo en las cadenas productivas como actor económico eficiente, sino también como ciudadano en las comunidades rurales constituyentes de una Nueva Ruralidad. Esta Nueva Ruralidad integra en lo local a proveedores de insumos y servicios, trabajadores de la industria frigorífica, de la maquinaria agrícola, de los comercios, de las escuelas y los bancos, de los clubes y hospitales, etc., en un entramado de gran consistencia. Esta Nueva Ruralidad viene reteniendo población en el espacio-territorio rural a contracara de las históricas migraciones de quienes abandonaban "el campo" para ir al conurbano bonaerense, y demás conurbanos.Esta Nueva Ruralidad, que es de índole sociológica y derivada de la Revolución Tecnológica, plantea que en las Pampas ampliadas de la Argentina, se puede ser agricultor y ciudadano rural ampliando los espacios de dignidad al promover un desarrollo humano rural en lo local.Esto es energía social, y no solo económica, que contrarresta y contradice tanto la concentración política como económica. Abre posibilidades locales pero al mismo tiempo requiere un encauzamiento político renovado en el entendimiento de su dinámica. Plantea tensiones y contradicciones que necesitan de políticas públicas de desarrollo humano que integren lo económico orientándolo en la construcción de comunidades socialmente sustentables. Varios gobernadores e intendentes vienen reconceptualizando a la instalada idea de la primariedad de la agricultura y su derivada ruralidad. Varios dirigentes rurales se van animando a plantear la temática del desarrollo superando su histórico discurso más vinculado a las cuestiones del negocio agropecuario. Pero hace falta ir más allá. Además de hacerse visible, lograr ser percibido como parte importante de la solución a los problemas de la comunidad nacional. Tal vez éste sea un desafío para la Mesa de Enlace: construir un renovado discurso consistente y ejecutar una comunicación eficaz en la presentación del agricultor como sujeto activo en la dinámica de esta Nueva Ruralidad al conjunto de la sociedad y a sus formadores de opinión que muchas veces la desconocen.

http://www.clarin.com/suplementos/rural/2008/12/27/r-01829059.htm